En una entrada del gran blog del Diaro de un ateo comentaba con acierto cómo el jefe de los corruptos daba lecciones de ética. Vivimos en una mierda de país donde las diferentes castas se dedican a predicar con el ejemplo; dicen una cosa y hacen la contraria. Yo no soy creyente y por tanto no participo de los llamados dogmas de las diferentes religones (por cercanía y educación, de la católica) pero, como decía un buen profesor de filosofía, los que no tenemos dogmas, tenemos dogmos, tenemos principios llámense éticos o como nos salga del higo.
Esta banda de tontolabas piensan que estamos en el Antiguo Régimen. Debemos obedecer, resignarnos, apaciguarnos, aguantar sus mentiras y falacias y agradecerles nuestra propia existencia. Si trabajamos es gracias a ellos, si la banca mejora es por su habilidad y buena gobernanza, si no trabajamos la culpa o es nuestra o es de otros y si la banca va mal es porque vivimos por encima de nuestras posibilidades y así hasta el infinito.
La iglesia catóica lleva siglos predicando la sumisión. Cuando te mueras, si has cumplido todo lo que te han dicho (ellos) irás a un sitio donde te lo pasarás de puta madre (el cielo le dicen), pero ellos viven como privilegiados, sermonean e imponen unos criterios y normas y luego meten mano a los niños, a los menos niños/as, (recuerdan a Marcial Maciel y su amigo el santo Juan Pablol II te quiere todo el mundo?). Exigen de lo público el arreglo de sus chiringuitos de los que luego se lucran con sus tarifas por visita, inmatriculan todo lo que les sale, no pagan impuestos, hay que colocarlos y pagarles en instituciones públicas (colegios, hospitales, cárceles, ejército...) y son un ejemplo claro de corrupción. Allí están.
El poder político en esta mierda de país está representado por la monarquía, loable institución cuya meritocracia consiste en el nacimiento y que se dedica al despilfarro y la mangancia; son los Urdangarines, Juancarlos y toda su parentela. Privilegios de casta.
El segundo nivel político está representado por los partidos que gobiernan, tanto a nivel central como autonómico. Son los Flick, Kio, Filesa, Ave, Cesid, Guerra, Sóller, Casino, Gal, Gescartera, Pallerols, Naseiro, Malalla, Gurtel, Matas, Pretoria, Millet, Noos, Eres, Bárcenas, Caja Madrid, Granados y su puta madre.
Y qué pretenden, ¿que les riamos las gracias otros 1000 años más?. El problema es que no hicimos una revolución (ni siquiera burguesa) en su momento y así nos va. ¡Que les jodan!
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