viernes, 9 de julio de 2010

Impuestos (Vicente Navarro). Resumen


Una de las políticas fiscales que han caracterizado el pensamiento neoliberal reproducido en la mayoría de partidos gobernantes en la Unión Europea, tanto de derecha como de centro izquierda, ha sido la reducción de impuestos.

El argumento que se utilizó para promover estas políticas fiscales, favorables a las rentas del capital y a las rentas superiores, era que había que cuidar (mimar, sería la expresión más adecuada) los factores movibles –tales como el capital y las rentas superiores–, evitando que se asustaran y dejaran el país.

Tal reducción de impuestos de las rentas superiores, además de incrementar las desigualdades, creó también las bases para que apareciera el problema del déficit del Estado. Este déficit fue causado, en parte, por la disminución de la actividad económica. Pero las políticas de reducción de impuestos, con la consiguiente reducción de los ingresos al Estado, contribuyeron enormemente a la creación de los déficits y del aumento de la deuda pública.

En España, el déficit del Estado no sería tan elevado si los niveles de imposición, tanto de las rentas del capital como de las rentas superiores, se hubieran mantenido igual a los existentes en los años ochenta.

Éste es el error del argumento ampliamente utilizado en las instituciones europeas en defensa de la austeridad del gasto público (incluyendo el gasto público social), indicando erróneamente que "hemos estado viviendo durante todos estos años por encima de nuestras posibilidades", asumiendo que nos hemos gastado más de lo que tenemos. Pero no es cierto y es fácil de demostrar. Tenemos el gasto público social más bajo de la UE-15, lo cual no se debe a que España no tenga recursos. España tiene ya el nivel de riqueza de la UE-15. Su PIB per cápita es el 94% del promedio de la UE-15. Y, sin embargo, el gasto social es sólo el 73% del promedio de la UE-15. Si nos gastáramos el 94% del promedio tendríamos 66.000 millones de euros más para gastarnos en nuestro escuálido Estado del bienestar. España tiene estos recursos. Lo que ocurre es que el Estado no los recoge. Y ahí está el problema. No es que vivamos por encima de nuestras posibilidades, lo que pasa es que los ricos, los bancos y los grandes empresarios no pagan lo que debieran.

Las políticas neoliberales han favorecido a las rentas superiores, creando una enorme polarización social, que han generado la crisis actual y que están dificultando la recuperación económica. Y ahí está el problema que los medios de persuasión no tocan.

3 comentarios:

Josefo el Apóstata dijo...

Las políticas liberales a ultranza siempre conducen a la polarización de los bienes (más bienes para menos gente y menos bienes para más gente). Sin la intervención de los estados con políticas de redistribución basadas en impuestos y en inversión social (sanidad, educación y protección social), los mercados (que tienen nombre y apellidos)ya se habrían comido con patatas a las clases más desfavorecidas (véase EEUU).
Lo acojonante es que esto no es una opinión, es un hecho, y los peperos nos quieren hacer creer que las políticas de "derroche social" son las causantes de la crisis. Y se quedan tan anchos...

MariaJU dijo...

y por qué no alimos a la calle ya y nos hacemos notar un poco como en Islandia?
Ah! bueno, sí, nuestro lastre del miedo y la contaminación nacionalcatólica con todos sus monstruos frikis q nos invaden

MariaJU dijo...

y ahora las cajas se privatizan por tol morro. joputas!